San Francisco a bocados: 7 paradas foodies obligatorias
Desde el barrio Castro hasta Chinatown, pasando por la zona del puerto. Aquí te descubrimos las paradas (y algunos restaurantes) imprescindibles para los viajeros amantes del buen comer que visiten la ciudad del Golden Gate.
San Francisco ha sido durante muchos años calificada como la capital gastronómica de Estados Unidos y lo cierto es que la ciudad del Golden Gate es la cuna de infinidad de tendencias culinarias que luego se acaban extendiendo por el resto del mundo como la pólvora. Hoy vamos a descubrir 7 paradas foodie que todo amante de la buena comida debe tener en cuenta si visita la ciudad.
Tal y como se imagina, en una ciudad que cuenta con más de cien barrios y una población en torno a los cuatro millones de habitantes, la oferta gastronómica es bastante extensa. Lo que se haya inventado y se pueda comer… está en San Francisco. Eso sí, hay tendencias foodie que pegan más fuertes que otras. La comida asiática, por ejemplo, es sobresaliente en la ciudad de la calle con más curvas del mundo. Podemos encontrar restaurantes chinos, japoneses, thai, coreanos, filipinos, vietnamitas… que nos trasladarán hasta oriente. Y todo con una amplia variedad de precios que permite que cualquier comensal pueda degustar este tipo de comida, tanto en puestos callejeros o food trucks hasta en restaurantes con estrella Michelín.
También exporta San Francisco propuestas gastronómicas que se acaban consolidando en el resto del mundo, pero hoy nos quedamos en esta ciudad para descubrir las 7 paradas imprescindibles para los amantes del buen comer.
Primera parada: Fisherman's Wharf
Arrancamos en el muelle de los pescadores, uno de los barrios más turísticos de todo San Francisco. Este enclave es sinónimo de marisco, almejas y ostras. El viajero que llega a esta ciudad no puede irse sin probar sus cangrejos cocinados (dungeness crab) y presentados en mil elaboraciones diferentes, sus guisos de marisco, sus ostras y su sopa de almejas que se sirve en una hogaza de pan con forma de cuenco. También es un ‘must’ la crab cioppino, una sopa de cangrejo, mejillones y almejas que suele acompañarse con un caldo de tomate, ajo y cebolla.
En San Francisco convive la tradición, con platos de marisco que han funcionado toda la vida, con la innovación absoluta. El ferry building, edificio cercano a la dársena desde donde salen los barcos a Alcatraz, se ha convertido en el marketplace que todo trendsetter gastro debe visitar. Sus propuestas y la calidad de sus productos convierten un almuerzo en una experiencia mística para el paladar.
Y, para una comida informal entre amigos, nada mejor que acudir al Pier 39, en el que la gente local se mezcla con infinidad de turistas deseosos de probar el mejor marisco de toda la costa oeste. Sin duda, un ambiente pintoresco y de lo más festivo.
Segunda parada: Chinatown
Chinatown es uno de los barrios más curiosos de todo San Francisco. Y, como bien te imaginas, ofrece un crisol de propuestas gastronómicas del país oriental. Es importante no tener miedo a la hora de probar cosas porque, en ocasiones, los mejores platos se esconden en los restaurantes más insospechados. Como consejo, si ves un restaurante lleno de turistas, huye inmediatamente, mientras que si ves uno atestado de gente local… ¡ahí es!
Los habitantes de San Francisco suelen tener el morro fino, como se dice vulgarmente, y no tienen problemas en esperar largas colas para comer en los mejores sitios. Y estos, pueden ser desde puestecitos callejeros hasta restaurantes en los que hay que reservar con muuucha antelación.
Como recomendación, no dejes de visitar la Golden Gate Fortune Cookies Co, empresa que fabrica las tradicionales galletitas de la suerte desde 1962. También puedes detenerte en alguna tienda de té y, cómo no, probar cualquier elaboración que se ofrezca en puestos callejeros. Si lo que buscas es algo más gourmet, hay varios establecimientos con estrella Michelín, como Dumpling Home (con unos precios de lo más competitivos) o HK Lounge Bistro, local renovado tras el incendio que sufrió hace años.
Tercera parada: Little Italy
Viajamos ahora hasta la bella Italia, pero sin salir de la ciudad de las cuestas. La pizza y la pasta pueden ser, quizá, de los platos más internacionales que existen. Y en San Francisco vas a poder disfrutar de algunas propuestas que te volarán la cabeza.
Si buscas un sitio auténtico, apunta: Golden Boy Pizza. Eso sí, ya te vamos avisando: es un local pequeño, con muy pocas mesas y atestado de gente. Seguramente te tocará hacer más de media hora de cola y solo sirven pizza en porciones. A pesar de ello, merece la pena. Y ya si pides su especialidad, la pizza de almejas y ajo, entenderás el porqué de su éxito.
Otros locales más finos y que aparecen siempre entre los más recomendados de comida italiana de la ciudad son Acquerello (ojo a su selección de vinos italianos), Sorella (del mismo equipo de Acquerello pero un pelín más nuevo y más económico) y Altovino, que se divide en una zona informal en la que tomar algún crostini mientras se degusta una copa de vino y una más chic en la que saborear un ‘buon pranzo italiano’.
Cuarta parada: Mission, el barrio latino
En Mission District o lo que es lo mismo, el barrio latino de San Francisco, la comida mexicana es la estrella. En la redacción de Revista VIAJAR hay quien sueña todavía con unos tacos que probó en la ciudad hace años. Y es que no sabemos si tienen algún ingrediente secreto, pero enganchan.
Taquería Cancún, Taquería El farolito, Chavitas o Castillito Chucateco son solo un ejemplo de las mil y una taquerías que se congregan en esta zona de la ciudad. Y, si lo que estás buscando es vivir San Francisco como un auténtico local (al igual que te hemos propuesto con Nueva York), te recomendamos que cojas algo de comer en cualquier foodtruck y te montes un picnic improvisado en Dolores Park. Las vistas de la ciudad son espléndidas.
En Mission también hay restaurantes de otras especialidades. Puedes encontrar, por ejemplo, Bellota, un local en el que el jamón serrano es la estrella indiscutible y las tapas son de lo más exquisitas. Obviamente, es una de las mejores representaciones de nuestra gastronomía al otro lado del Atlántico.
Quinta parada: Castro, el barrio multicolor
Castro es uno de los barrios más vibrantes de todo San Francisco. La bandera arcoíris ondea en prácticamente cada balcón y ventana de la zona. Y es que este fue uno de los primeros barrios gay en los Estados Unidos y sigue siendo un símbolo del activismo LGTBIQ+ de todo el mundo. Eso, y su proximidad al distrito comercial, han conseguido que sea un lugar de referencia a nivel gastronómico.
Vas a poder descubrir cualquier especialidad culinaria pero prima, sobre todo, la comida saludable con productos ecológicos. Quizá, lo más interesante, sea descubrir algunos locales de comida californiana, como Ike's Place. Allí vas a poder degustar una de las especialidades típicas de San Francisco, sus sándwiches sourdough bread, con un tipo de masa que se ha convertido en un icono gastro de la ciudad.
Otro local mítico es The Castro Fountain, una pastelería con dulces que son una delicia. Eso sí, las colas para poder probar alguno de sus bollos también es antológica. Además, es un espacio de lo más instagrameable. Con un café y un pastel de calabaza en la mano sentirás el verdadero ‘American way of life’.
Sexta parada: Haight-Ashbury o el barrio hippy
El nombre del barrio hippy de San Francisco deriva de la combinación de sus dos calles principales: las avenidas Haight y Ashbury. Su época dorada fueron los 60, convirtiendo este enclave en el epicentro de la vida moderna. Y, a día de hoy, es un vecindario en el que se puede comer bien por unos pocos dólares. Eso sí, que su carácter alegre no te engañe porque también alberga alguno de los restaurantes más caros de la ciudad.
En este barrio no deberías perderte la visita a la casa de Jimmy Hendrix (sí, ya sabemos que hablamos de paradas foodie pero no hemos podido evitarlo) y dejarte seducir por su propuesta más verde. La comida plant based tiene aquí su máximo exponente y comer algo en la calle Fillmore es casi una obligación. Especial mención merecen State Bird Provisions (ojo a sus costillas) y Jane on Fillmore, que tiene unas tostadas que son, sencillamente, para ponerles un monumento.
Y, no podemos irnos de esta icónica calle sin hacer parada en Merchan Roots, restaurante con estrella Michelín que ofrece menús degustación cerrados de diferentes temáticas. Actualmente ofrecen uno basado en la uva como ingrediente principal y cuesta 150 euros sin la opción de maridaje.
Séptima y última parada: Sausalito
Si bien es cierto que Sausalito está cruzando el Golden Gate, lo cierto es que muchos consideran que forma parte de San Francisco. Cerramos nuestra ruta gastronómica aquí con los mismos ingredientes estrella con los que la abrimos: mucho marisco, y ostras, muchas ostras.
Sausalito es mar, y es ley recomendar sitios en los que comer ostras se convierte en una experiencia religiosa. Scoma's of Sausalito es un restaurante top en el que comer ostras y otros platos típicos como su mítica ensalda de camarones de la bahía. Además, el precio medio se sitúa en torno a los 30 euros con bebida.
Otra opción si se cruza el Golden Gate es descubrir algunos de los mercados que hacen de Sausalito una parada foodie imprescindible, como el Drive's Market, un espacio que cuenta con diferentes propuestas gastro y una zona central de mesas en la que degustar lo adquirido.
En definitva, San Francisco es una ciudad para comérsela a bocados, para disfrutar de cada uno de sus barrios y de sus propuestas foodie. Y es que, aunque hoy hemos hecho 7 paradas, esta ciudad siempre tiene nuevas propuestas gastronómicas que ofrecer.
Síguele la pista
Lo último